La imagen del desierto puede parecer simple, pero es mucho más compleja de lo que, a simple vista, parece arena y cielo azul. El desierto es el lugar dónde el corazón se encuentra en silencio con Dios . Lejos de los ruidos de la ciudad, de la masiva cantidad de mensajes que nos llegan de distintas aplicaciones y de los constantes bombardeos sociales para " avanzar ", para " tener éxito ", " planear " tu vida, " organizar " tu semana, sacar " buenas notas ". Pareciera que quisiéramos controlar cada aspecto de nuestra vida externa, pero apenas dedicamos tiempo a lo que sucede por dentro . En ese lugar secreto donde viene la paz que sólo Dios nos da. Los padres del desierto fueron llevados por el Espíritu Santo a la soledad y en el silencio de ese mar de arena, estaban en constante oración y practicaban ayuno constante; todo esto sin sin ser distraídos por las cosas del mundo . Sin embargo hay algo que siempre nos acompaña a todos...